Las autoridades antimonopolio de la Unión Europea impusieron a Intel el viernes una nueva multa de 400 millones de dólares en una larga batalla legal que el fabricante de chips parecía haber ganado el año pasado.
La Comisión Europea impuso la multa de 376.4 millones de euros después que un tribunal anulara una multa original de 1,060 millones de euros impuesta en 2009 por acusaciones de que la empresa con sede en Santa Clara, California, utilizó tácticas de ventas ilegales para excluir a su rival más pequeño AMD.
La Comisión, el principal organismo de control antimonopolio del bloque de 27 naciones, acusó a Intel de abusar de su posición dominante en el mercado global de microprocesadores x86 con una estrategia para excluir a sus rivales mediante el uso de reembolsos y restricciones de ventas.
El año pasado, el Tribunal General de la UE anuló la decisión original, señalando que el análisis de los reembolsos realizado por la Comisión no cumplía con los estándares legales.
Sin embargo, el tribunal confirmó que las restricciones a las ventas constituían un abuso de la posición dominante de Intel en el mercado. No pudo decidir cómo se podría dividir la multa total entre las dos infracciones, por lo que la Comisión tuvo que determinar una nueva cifra.
“La multa más baja impuesta por la decisión de hoy refleja el alcance más limitado de la infracción en comparación con la decisión de la Comisión de 2009”, explicó el organismo de control de la UE.
El equipo de prensa europeo de Intel no ha respondido un email en busca de comentarios.